miércoles, abril 14

imponente como el solo .


soy el lobo estepario que se mueve por un cosmos cubierto de nieve ; del abedul desnudo sale volando un cuervo , mas no encuetro en el páramo ni a la liebre ni al ciervo .
Tiemblo de pasion , de amor , por una cierva ligera , nada en mundo tan delicioso y bello fuera
como hundir mis colmillos con apremio galante , en la ternura tibia de su cuerpo sangrande .
Una vez y otra vez mi deseo persiste
y mis dientes retoman a morder su blancura y ha saciarme la sed con su roja ternura . Y al final quedo aullando solo en la noche triste -
ah , tambien mi deceo se volcaria en la liebre , dulce es su carne enjuta , deliciosa a su modo , mas hundirle mis dientes , encendido de fiebre , tambien me dejara desproviso de todo .
Se me ha vuelto gris mi gran rabo peludo , me pongo cegatón , me estoy haciendo viejo , sin hembra y sin guarida , vuelbo a mis sueños mudos , de corza o liebre que no estan y estan lejos .
El viento silva en la estepa del invierno ; bebo la nieve y marcho hacia el infierno .
Esta noche , apartir de las cuatro , teatro magico
- Solo para locos -
La entrada cuesta la razon , no para cualquiera ...
¡ el infierno se esta armando !